30 mayo, 2019

[Entrevista] “El diagnóstico no es el problema, de lo que carecemos es de institucionalidad”

Entrevista: Canal N 30/05/19

Alonso Cárdenas, docente de la Escuela de Ciencia Política de la Universidad Antonio Ruiz de Montoya, señaló en Canal N que Perú cuenta, hace más de treinta años, con estudios sobre la calidad de suelos a nivel nacional. “Los diagnósticos no son el problema, tenemos la información, de lo que carecemos es de la institucionalidad para emprender las políticas públicas de prevención sísmica que el Perú requiere con urgencia para reducir las pérdidas humanas que, ante un terremoto, serían catastróficas”, expresó.

Para el politólogo, la herramienta fundamental para enfrentar un desastre es tener un servicio civil profesional con baja rotación como lo tiene México y Chile, esto permite contar con personas capacitadas para diseñar las estrategias y asegurar la continuidad de las políticas. “En el Perú las autoridades de mandos medios, a cargo de tomar las decisiones para implementar las políticas públicas, no permanecen más de seis meses en los cargos estratégicos a nivel del Estado. Con este nivel de rotación es imposible implementar una política de largo plazo”, señaló.

Según un estudio de la Universidad de Cambridge la capital con mayores pérdidas económicas en el mundo ante un terremoto sería Lima. La cifra calculada es de 35 mil millones de dólares con lo que la economía del país quebraría. El segundo lugar lo ocupa Teherán (Irán) con 30 mil millones de pérdidas y, en el lugar 25, se ubica México con 5 mil millones de dólares de pérdidas.

“Es obligación del gobierno garantizar en el breve plazo que todos los hospitales públicos no se destruyan ante un sismo de gran intensidad, ni tampoco todos los colegios públicos ni los ministerios. En Lima existen 7 500 colegios ¿cuántos están en capacidad de resistir un sismo de 8 grados?, tenemos 202 hospitales, ¿cuántos podrían permanecer en pie? El gran reto, además de salvar vidas, es mantener la gobernabilidad en el postsismo”, subrayó.