4 junio, 2018

“Pese a los esfuerzos las cifras de víctimas de trata de personas se mantienen”

Perú ocupa el tercer lugar en el continente americano con mayor número de denuncias de trata de personas (Informe: Defensoría del Pueblo). La trata de personas es un flagelo que afecta a la región. Por ello, el VI Encuentro de la Red Kawsay Perú se enfocó en este delito para identificar los desafíos y la problemática que impide terminar con esta forma de esclavitud moderna. El director del Instituto de Ética y Desarrollo (IED) de la Universidad Antonio Ruiz de Montoya, Eduardo Vega, participó en el encuentro y explicó la tipificación penal y el estado de los casos.

El ex defensor del pueblo cuestionó la sentencia que emitió la Corte Suprema de Justicia al absolver a una señora que había sido acusada de tratante porque, según el veredicto, el trabajo de dama de compañía no agota la fuerza laboral y, por lo tanto, no es considerado trata de personas a pesar que la víctima haya sido una niña de 14 años. Recomendó que se produzca un acuerdo plenario que corrija esta sentencia, con apoyo de la sociedad civil, de manera que la Corte Suprema la aplique en los casos de trata de personas.

Existen tres elementos de la trata de personas: la conducta (el uso de violencia, engaño o fraude para amenazar a la víctima), el medio (el transporte que se encarga de recibir y retener) y los fines (la explotación mediante trabajos sexuales o de servidumbre). Además, indicó que los problemas para frenar la trata de personas son el poco presupuesto invertido para las fiscalías, la naturalización e impunidad de este problema y la falta de protección y reinserción de las víctimas.

El docente de la Escuela de Derecho Eduardo Vega mencionó que las instituciones públicas están efectuando buenas prácticas contra la trata de personas como la protección de derechos de la víctima e involucramiento para ofrecerles una asistencia integral. Sin embargo, las malas prácticas de algunos funcionarios son constantes como la deficiente calidad en la asistencia a las víctimas y no les brindan un rol protagónico durante el proceso penal y tutelar. “Pese a los esfuerzos las cifras de víctimas de trata de personas se mantienen”, afirmó.