Marisol Vargas, docente de la carrera de Ciencia Política de la Universidad Antonio Ruiz de Montoya (UARM), participó en un informe de El Comercio. Analizó la efectividad del programa de recompensas, iniciativa del Ministerio del Interior que entrega bonos económicos a cambio de información de los prófugos más buscados.
De acuerdo con la politóloga, hay una mayor predisposición de la ciudadanía de colaborar en la captura de prófugos de violencia a menores de edad, debido a que genera una indignación generalizada.
“Este tipo delitos, que además son horrendos, son también los que generan indignación y mueven en el sentimiento de la gente”, enfatizó.
Sin embargo, durante el 2024, se realizaron menos capturas a comparación de años anteriores. En lo que va del 2025, hubo 49 requisitoriados.
Informe completo aquí.