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23 abril, 2024

[Artículo RPP] Ricardo Falla: Enzo Traverso: el riguroso arte de indagar, pensar y escribir

Uno de los rasgos más evidentes de una crisis cultural generalizada, es el declive constante del rigor intelectual. La banalidad y la superficialidad se vuelven dominantes, haciendo imposibles el ejercicio crítico y la objetividad de juicio que se precisan para entender las esferas de nuestro mundo. La realidad, en sus múltiples manifestaciones, es siempre compleja. Por ello, caer en el facilismo de la respuesta fútiles, es algo que se debe evitar a cualquier precio.

El gran compositor alemán Richard Strauss (1864-1949), al ser consultado sobre qué condiciones se requerían para crear una obra notable, afirmó que un “diez por ciento de inspiración y un noventa por ciento de transpiración”.

Con esta sentencia, el célebre músico germano, nos daba a entender que en toda creación son necesarios el rigor, el esfuerzo y el conocimiento suficiente para culminar una obra. No basta con una idea o con un sentimiento que aletea. Para la consecución de algo importante, es preciso enfrentar el proceso creativo con una firme disposición para el trabajo y el duro estudio.

Cualquiera que esté interesado en comprender de forma enjundiosa el vínculo entre las ideas y los intelectuales en diferentes contextos políticos y culturales, tiene en la obra de Traverso un material fundamental para proseguir con sus propias indagaciones.

En ‘El final de la modernidad judía: Historia de un giro conservador’, el historiador italiano reconstruye, de forma rigurosamente documentada, el espléndido escenario intelectual de la modernidad judía, desde mediados del siglo XVIII hasta la primera mitad del siglo XX, periodo en que la literatura, la música, la filosofía, la política y las diversas ciencias, estuvieron fuertemente influenciadas por la participación activa de judíos.

Pues esta comunidad cultural (más allá de sus orígenes religiosos), constituyó uno de los centros de ilustración y secularización más avanzados de occidente. Así, personajes gravitantes y muy distintos como Marx, Mendelssohn, Mahler, Kafka, Freud, Trotsky, Luxemburgo, Bohr, Einstein, Wittgenstein, Popper, y un impresionante etcétera, fueron de origen judío. Y dejaron una obra que resulta insoslayable para reconocer la modernidad poliédrica tal como la entendemos.

Sin embargo, esta fuerza progresista y secularizada, convivió desde fines del siglo XIX con un fuerte identitarismo judío, de corte conservador. Y tras la terrible experiencia del holocausto, el progresismo modernizador, fue perdiendo fuerza ante una tendencia “filosemita”, es decir, la prevalencia de un discurso ideológico que enfatizaba las raíces culturales del judaísmo.

En esa consolidación de lo “judío”, las diversas élites de dicha comunidad construyeron una narrativa que avalaba el status quo mundial, dejando atrás sus raíces críticas. En ese sentido, el excelente trabajo de Traverso nos ayuda a identificar las inflexiones intelectuales de los judíos de las últimas décadas y los poderosos debates que aun se dan en el interior de dicha comunidad.

Creemos que este libro de Enzo Traverso es importante si queremos entender las ideas dominantes que animan a la política internacional de Israel en las últimas décadas, sobre todo después de 1967. Además, porque nos brinda una visión rigurosa, reflexiva y muy bien escrita a fin de comprender, desde una perspectiva crítica y documentada, la actual guerra en la Franja de Gaza. Obras de este calibre son fundamentales para superar la banalidad de los juicios actuales.

Lea la columna del autor en Rpp.pe

Sobre el autor:

Ricardo L. Falla Carrillo

Jefe del Departamento de Filosofía y Teología de la UARM

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